Los mejores consejos para instalar un sistema de riego en una terraza

Los mejores consejos para instalar un sistema de riego en una terraza

Estamos acostumbrados a pensar que un sistema de riego solo es válido en un jardín, ya que nos imaginamos este tipo de sistemas como una serie de aspersores que se limitan a escupir agua en diferentes direcciones. Sin embargo, un sistema de riego es mucho más que eso, y no es necesario que tengas un jardín para recurrir a él. Si eres un amante de las plantas y cuentas con una terraza llena de ellas, no me cabe duda de que te habrás plateando en más de una ocasión el instalar un sistema de estas características para tener la certeza de que tus plantas reciben lo que necesitan siempre que lo necesitan. Hoy me he propuesto traerte buenas noticias, y es que, efectivamente, puedes instalar un sistema de riego en una terraza, perfectamente eficiente y de una manera mucho más sencilla de lo que probablemente imaginas.

Evidentemente, aunque habrá que tener también en cuenta el tipo de jardín del que hablamos, un sistema de riego pensado para un espacio exterior no es el mismo sistema que instalaremos en una terraza. El espacio, para empezar, es mucho más reducido, y teniendo en cuenta cómo funcionan la mayoría de sistemas de riego exteriores, lo último que queremos es que nuestra terraza esté siempre mojada, especialmente si se debe a que hay un aparato repartiendo agua por todas partes y a determinadas horas. No, un sistema de riego en terraza es muy simple, y no recurre a aspersores ni a grandes cantidades de agua, precisamente porque, si es en terraza, raro será que tus plantas necesiten tanta agua como un jardín con césped.

Existen diferentes tipos de sistemas de riego, y no todos son aptos para una terraza, por eso voy a darte una serie de consejos básicos para poder instalar en la tuya el sistema de riego que mejor se adapte a ti y a tus plantas. Un sistema de riego te será muy útil no ya solo para mantener el riego constante que necesitan aun estando tú en casa, sino para asegurarte de que reciben todos sus nutrientes en épocas estivales en las que tú estés de vacaciones, por ejemplo. En definitiva, un sistema de riego es lo mejor que puedes hacer por ellas, y voy a explicarte cuál es la mejor manera de conseguirlo.

La mejor manera de instalar un sistema de riego en nuestra terraza

Para empezar, tienes que tener claro cuáles son tus opciones. Como bien sabrás, el sistema de riego más común en jardines y espacios exteriores es el riego por aspersión, que consiste en programar una serie de aspersores para que rieguen de manera autónoma. Este sistema es muy práctico para jardines amplios, pero no es tan bueno para plantas más delicadas, ya que no suele recomendarse regar los pétalos sino la base. Por eso existen otros sistemas de riego, también orientados a huertos más concretos, que consisten en una serie de mangueras perforadas que humedecen la tierra en la que se encuentran los árboles o las plantas que queramos regar. De nuevo, se trata de un sistema a mayor escala. Si lo que quieres es un sistema de riego para un espacio reducido, como tu terraza, el más popular y el más fácil de montar es el riego por goteo. Es una forma de regar bastante clásica, y consiste en colocar un tubo de plástico con un pequeño orificio y dejar que el agua caiga gota a gota. De esta forma, la tierra de las plantas estará siempre húmeda, aportándoles nutrientes y refrescándolas en caso de que les esté dando el sol (fuente).

Existen sistemas de goteo profesionales que puedes adquirir por poco dinero, ya que se trata de aparatos muy simples. Sin embargo, si no quieres tener que acudir a una tienda para poder montar tu propio sistema de riego, bastaría con una botella pequeña, de no mucho peso para no presionar la planta. La pones bocabajo y haces un pequeño orificio en el tapón. Muy pequeño, lo suficientemente pequeño como para que solo pueda salir una gota, sin riesgo de pérdidas. Solo tienes que colocarla ligeramente por encima de la tierra, para que esta no haga de tapón y el agua no consiga salir, y voilá. Ya puedes disfrutar de un sistema de riego casero, fácil, sencillo y práctico que aportará a tus plantas todo lo que necesitan en todo momento.

No obstante, y si no eres especialmente manitas, sí te recomiendo acudir a una tienda especializada para que, como mínimo, te asesoren con respecto a cuál es el mejor sistema que puedes instalar en tu terraza, y a que te den indicaciones precisas. Además, si compras un sistema de riego por goteo profesional, puedes contar con un programador para escoger en qué períodos regar, y un regulador, para elegir la presión del agua.

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